Utilizando las redes sociales y un video testimonial destacaron la importancia de la festividad en honor a la virgen del Carmen que igualmente fue suspendida por los efectos de la pandemia mundial.
La tradicional Fiesta Religiosa de la localidad de El Durazno, organizada por la Comunidad Agrícola Olla de Caldera, también fue afectada por las consecuencias de la pandemia del covid-19. Es por ello que a través de un video emitido a través la página web de la organización y las redes sociales los dirigentes enviaron un emotivo mensaje a los fieles y a las miles de personas que llegan a este encuentro religioso durante dos días (31 de octubre y 1 de noviembre). De hecho, el año pasado el evento ya había sido trasladado para el mes de diciembre producto del estallido social.
Cabe destacar que junto a la fiesta religiosa de Almirante de La Torre, la de El Durazno es una de las más importantes que se desarrolla al interior de la comuna de La Serena, donde su principal momento es la procesión por el entorno de la capilla que está enclavada entre medios de cerros. Incluso, en la actividad participa una delegación a caballo como símbolo del reconocimiento a la virgen del Carmen, protectora del pueblo a quien se le pide por los años buenos y mantenga a los pobladores de los sectores cercanos con salud.
El instante más simbólico es cuando la virgen es ingresada al altar de la capilla y los devotos se despiden hasta al próximo año agradeciendo por las promesas cumplidas o elevando nuevas peticiones. Fue precisamente desde este mismo lugar que el dirigente de la comunidad, Pedro Bernal Cárdenas envió su mensaje, al que se unieron el resto de los integrantes del directorio que preside Susana Alfaro Villarroel, Eduardo Cox, Juana González, Jorge Villalobos, Carlos Bernal y Wilson Ángel.
MARCADA POR LA HISTORIA
Los antecedentes históricos establecen que en su momento la festividad religiosa se había dejado de hacer tras la muerte de Miguel Rivera y su esposa que se habían transformado en guardianes de la capilla del pueblo donde se venera a la virgen del Carmen. Sin embargo, se retomó con fuerza el 2010 con la construcción de un nuevo templo y el evento cobró mayor fuerza con el desarrollo en paralelo de una fiesta costumbrista, rodeo de burros, carreras a la chilena y realización de juegos típicos.